sábado, 12 de febrero de 2011
Impensable
Dormir entrelazados, sin preocupación, hablar de poesía y de Napoleón... esperar a que algo nuevo pase. Sentirlo en la piel. Sentirme en su piel. Feliz por estar cerca de él. Pensando en él aunque seguramente yo no le pase por el pensamiento. Una buena noche, una dichosa mañana. Existir de manera diferente. Devenir de la homosexualidad, en Valencia.
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Sea como sea, impensable la manera en que te odio envidiosamente en este momento (¿?)
ResponderEliminarSaludos desde estos lares, siempre es un gusto leer tus visitas en mi blog.
:D
jajajajajajajaja ay chica, envidia? nada, que tú estás genial por alla!
ResponderEliminarYo por acá... pues lo disfruto =P Me encantó tu metáfora del sexo y el cacahuate jajajajaja