Suspiro, de anhelo, esperanza, suspiro porque no tengo ni idea de lo que pasará este año, suspiro al recordar este año en el que me pasaron tantas cosas.
sábado, 31 de diciembre de 2011
A poco de...
Suspiro, de anhelo, esperanza, suspiro porque no tengo ni idea de lo que pasará este año, suspiro al recordar este año en el que me pasaron tantas cosas.
viernes, 23 de diciembre de 2011
Santa No... mi novio SÍ!
domingo, 18 de diciembre de 2011
Jotas
sábado, 10 de diciembre de 2011
Pero... te amo
martes, 6 de diciembre de 2011
Lo que hay que ver...
La verdad sigo queriendo huir. No sé a donde, se me antoja que será a la literatura. Tanto lectura como escritura. Suele pasar que esta época navideña no me agrada (me ahorro los detalles) pero lo que sí me gusta es ese tiempo libre para tener un libro en el regazo, sentarme frente al fresquito invernal brindado por la ventana, tomar café o té. No sé lo que leeré, pero ya empecé a comprar (más, más, más siempre) más libros, como si no me bastaran, y así acrecentar mi colección. Las compras siempre han sido un antidepresivo.
sábado, 3 de diciembre de 2011
Melancholia
martes, 29 de noviembre de 2011
Vanidad
lunes, 21 de noviembre de 2011
Mejor
miércoles, 16 de noviembre de 2011
Cenizas de luna
sábado, 12 de noviembre de 2011
Ese de ahí no soy yo
En ocasiones creo que los seres humanos nos prohibimos ser honestos los unos con los otros. Podrá ser que desde mi regreso intento ser más transparente pero sufro un cruce de cables existencial bastante fuerte. Por un lado deseo, ansío ser más directo; por otra parte, aunque la gente que me conoce me cree un sarcástico agresivo, la verdad es que no puedo ser así con todas las personas, no se puede tener el mismo nivel de confianza, ¿por qué?, ¿por qué esté mundo con pinzas?
Mi sarcasmo y humor negro efectivamente sólo es entendido por mis seres más cercanos, mientras que con el resto, si lo expreso, se ofenden, si soy más honesto, se sienten agredidos. También no siempre puedo ponerme en posturas “serias” y recalcitrantes porque entonces se incurre en una intrusión social con las personas.
Me parece la sociedad desea ese arrullo cotidiano del “Buenos días, buenas tardes, buenas noches”, “Hola, adiós, ¿cómo estás?, bien… bonito, qué bien te ves… te ves cansado, ¡oh qué frío!, ¡calor que hace!”, etc. Frases prefabricadas para hacer la vida un poco más tranquila, transitable.
Me quedé pensando que quizá todos tenemos (o tuvimos) nuestras ideas tajantes, pensamientos que no compartimos con personas que incluso amamos a montones, pero al final sencillamente lo callamos para crear lo que me parece “una sobre-domesticación de lo cotidiano”. Nos gusta que nos ladren con elegancia, las sentencias de muerte se dicen con cierto tono edulcorado para quién las profiere no sea arremetido con sus propias palabras (más allá de la acción). Cuestión dentro de la manipulación del lenguaje oral, corporal, proxémico.
Incluso la crítica de arte, de cine, por más clara y honesta que se preste casi siempre será tomada de forma ofensiva. O por el otro lado, la producción de cine, este espacio donde se delega, se gestan proyectos, toman decisiones, se abofetea al equipo con quién se trabaja con mano firme pero sin malas intenciones, cuando se pide el patrocinio con toda la falsedad posible, aún cuando uno se siente falso y el que patrocina sabe que se encuentra frente a una actitud falsa pero un proyecto verdadero. Me sorprende que de tanta complicación y falsedad surjan acuerdos concretos.
Somos consientes del teatro y aún así optamos por la mascarada. Entendemos que el rostro que nos muestran no es más que un cúmulo de maquillaje, pero lo aceptamos como verdadero, ¿es esta falsedad un tipo de vida usual, tanto que permea nuestra subjetividad cotidiana a tal grado de perder esa definición de “falso” por “correcto”, pasando por “necesario”? Son las leyes de la sociedad, adaptación o muerte, eso lo tengo muy claro, siempre lo he dicho, pero aún así tengo días donde me sorprende el vacío existencial que nos dejan todos estos carnavales caducos por lo mismo de ser cotidianos. De ver la utilidad e infelicidad de patrocina el maquillaje social y que aún así optamos por especializarnos frente al espejo para saber qué colorete queda mejor para tal o cual ocasión.
martes, 8 de noviembre de 2011
A seis grados de...
martes, 1 de noviembre de 2011
The Women
-¿Por qué iba a deprimirme?- contesta Sylvia mientras arregla su sombrero.
-Porque está contenta, contenta con lo que es.
-¿Y qué es?
-Una mujer
-¿Y nosotras?- pregunta Sylvia entre sonrisas.
-Hembras
-¿Y tú qué eres?- le desafía Sylvia.
-Soy lo que la naturaleza aborrece, una vieja solterona sin valor- dice ella.
-¡Oh!- exclama Edith- vayamos a ver que hace Mary- En el acto Sylvia y Edith se van al aseo para cotillear en privado y a gusto sobre Mary.
En este pequeño diálogo se da una clara referencia a Mary como mujer, la mujer perfecta que no encuentra ningún problema con ser el prototipo que la sociedad demanda, ella es feliz con lo que es y poco le preocupa su orgullo de mujer, el mismo que defenderá en toda la película pero que al final dice no necesitar.
Fragmento de mi ensayo "Feminidad o feminismo", sobre la película "The Women" de George Cukor.
En ocasiones me pregunto ¿qué habría pasado si yo hubiera sido mujer? Mis amigas y hermana dicen que seguro sería una diva insoportable, que me creería bonita y popular। Yo... la verdad creo que tienen razón, pero no existe mucha diferencia con lo que soy ahora. La gente de fuera me ve como una diva insoportable que se cree bonito y popular. Ni modo, me encanta bromear con ello y eso les molesta más, pero desde hace tiempo entiendo que no se puede satisfacer a todos, ni que fuera TAN puta.
"The Women", cada vez que la veo me digo "Quizá yo sería más un tipo de Rosalind Russell en el papel de Sylvia Fowler। Gran malicia, inteligente en el cotilleo pero inútil en todo lo demás, al final se encuentra aburrida y sólo quiere divertirse".
La película la vi hace tiempo, ya ni recuerdo por qué, creo que por alguna recomendación de algún extraño/anónimo de la web। La conseguí y me enamoré de ella. Cuando estuve en España y nos dejaron realizar un ensayo que contrapusiera dos películas de Cine Clásico, escogí "The Women" de Cukor (1939) y su remake "The Women" de English (2008), no es por alabarme tontamente, pero el resultado fue muy bueno. Escribí un texto algo largo con mucho amor, un poco de humor y una postura casi feminazi, pero si ya dicen que soy heterofóbico, ¿por qué no ser también feminazi?, a mi profesora (feminista) le agradó el texto, tuve buena nota, y no escribí para satisfacerla, sino porque es lo que pienso.
Me doy cuenta que las posturas pesan así como los prejuicios, y se me hace algo extraño (aunque no por ello menos gracioso) la visión del otro frente a mi trabajo y propiamente frente a mi persona. Pasar de ser la diva insoportable amante de María Antonieta y la ropa bonita, al chico gay que no habla más que mujeres en la historia, feminismo y teoría queer, mezclando todo, es como si Carrie Bradshaw y Virginia Woolf se sentaran juntas a tomar el té, vaciando las cenizas de sus cigarros en el mismo cenicero. Pero eso pasa, en mi mente pasa todos los días. Así de esquizofrénico estoy.
miércoles, 19 de octubre de 2011
Amo el videoclip ¡¡Y ME VALE MADRES LO QUE DIGAS!!
El lunes pasado presenté mi proyecto con Miss Cannes (profesora de creación en ficción) lo jodí (o me jodí???) todo. A ella no le parece bien que haga un videoclip en clase de ficción, porque no se aprovechan las posibilidades que dan el sonido en la ficción. De mi parte intenté (torpemente) explicarle que mi intención era hacer una pieza sobre la identidad queer y la ruptura de los estereotipos que nos rodea a la sociedad LGBTQ, partiendo cual secuela de otro video(clip) que hice hace dos años... sin embargo no lo entendió, o así quiero creerlo.
La verdad esta tolerancia heterosexual me caga, me caga en todos los sentidos, ¿por qué tiene que venir esa mayoría a decirme lo que tengo o no tengo permiso a sentir, hacer? ¿por qué YO, como artista visual debo hablarle a un público amplio, mayoritario, con imágenes que los conmueva para que "nos acepten"? Lo siento, eso ya lo hizo "Brokeback Mountain", y sí, me imagino que todos dijeron "Pero mira cuánto se aman". Fin. La película no me gustó, me pareció lenta, aburrida, cíclica, autocomplaciente y se autocompadece.
domingo, 16 de octubre de 2011
¿Qué es lo que extrañas?
Llevo un par de semanas sintiéndome algo vació (bastante, diría yo) no es la primera vez que esto me sucede, y cuando pasa me pregunto a mí mismo ¿qué es lo que extrañas?
No suelo tener la respuesta muy clara, pero ahora sí, demasiado. Extraño Valencia.
-En ocasiones de Valencia extraño más la soledad que la compañía.
-Extraño poder caminar por las noches sin miedo.
-Desearía poder regresar y leer una vez más en sus parques, playas, cafeterías…
-Ir en bicicleta los domingos cuando no hay nadie por las calles y esperar la llamada de mi ahora ex novio, tomar esas riendas tontas y singulares de la independencia.
-Extraño el sexo. Tener mucho sexo.
-Las salidas nocturnas y el exceso de alcohol.
-Zorrearle a gusto y recibir varias miradas lascivas.
-Las buenas librerías, pasear por ellas.
-Las clases con datos suculentos. Sé que me quejé mucho al ir a España, pero ahora que vuelvo mis clases siguen sin ser muy buenas.
-Extraño extrañar a mi familia… me gustaría volver a tenerlos lejos, por un rato más (suena mal, pero así son las cosas)
-Extraño que mi vida se dedique a otras cosas y no únicamente a la escuela/casa/servicio social, como lo es ahora.
-La gente de distintas nacionalidades y por ende diversas visiones del mundo, cara a cara, sin intermediarios hipertextuales.
-Tener tiempo para cocinarme y tener esa libertad de decidir qué comer y a qué hora.
-Dormir sin culpa.
-Extraño mucho a mi novio.
-A mis compañeras de piso y mis amigas y amigos de allá.
-Pasear a la deriva sin nada que hacer, sin preocupaciones.
En pocas palabras, extraño mi vida propia, llena de libertades, sí, pero también de aparentes responsabilidades. Una tonta libertad, un estúpido anhelo.
También extraño muchas cosas más... supongo, pero todas son tan poco conscientes como el deterioro que he estado sufriendo desde que volví para "encontrarme" en esta jaula de oro que llamo vida.
domingo, 2 de octubre de 2011
Mostrar los huesos
sábado, 10 de septiembre de 2011
Por siempre Belle de Jour
viernes, 2 de septiembre de 2011
domingo, 21 de agosto de 2011
viernes, 12 de agosto de 2011
Mi amiga...
En Valencia conocí a la persona más lúcida que, hasta ahora, he conocido. Ella es un ser humano, así nada más, ella me enseñó tanto y la recuerdo demasiado. Le debo un correo que me tengo que poner a redactar. La verdad le debo más de lo que ella seguro se imagina. Me dijo que yo era un ángel, pero si yo soy ese ser "luminoso", ella es toda la luz y la oscuridad, así, antes de que la luz y las tinieblas se separaran.
Me acuerdo de ella mucho ahora que me siento tan bien y feliz, quizá enamorado (otra vez), y como me dijo: Yo podía enamorarme en un día, dejar de amar el mismo día, amar a varios al mismo tiempo, amar al mundo entero.
Canto, canto a todas horas y casi lo que sea. Canto a la vida. Canto a la felicidad.
lunes, 1 de agosto de 2011
El montañés de ojos azules
Valencia estaba vista
... gozada
... ultrajada
... agotada
... llena de felicidad y algunos momentos de odio
Yo estaba listo para regresar a México, irme de Valencia pero apareció él... y entonces, sólo lo extraño. Extraño a mi montañés de ojos azules.
lunes, 27 de junio de 2011
Ya no te amo más
martes, 21 de junio de 2011
miércoles, 15 de junio de 2011
Esta cama...
sábado, 11 de junio de 2011
Solo
Hoy ha sido, por poco o por nada, uno de mis peores días en Valencia y ni siquiera sé la razón. Vi “Ágora” de Amenábar, la considero buena película (a pesar de todo lo que diga la crítica), también me vi dos películas de Gregg Araki (“Kaboom” y “The doom generation”), me doy cuenta de que mi gusto cinematográfico se ha variado y abierto gracias a mi estancia aquí en España, Araki me agrada (a pesar de todo lo que diga la crítica), después vi pedazos de “Jawbreaker”, ya saben, esa película donde Rose MacGowan mata a su “amiga” con un caramelo. Esa peli me gustaba mucho cuando tenía 14 años, ahora me avergüenzo de esos gustos, y lo digo aún cuando me agradó “The doom generation”, igual con MacGowan.
Ha sido un día de cambios reflexivos muy fuertes, cañones, cañones (como diríamos en México), brutales, horribles, vivificantes, temerarios, un día como cualquiera. Y es que me desperté con tantas ganas de disfrutar mi primer fin de semana libre y resulta que no tenía nada que hacer… o ¿nadie con quién estar? A mí la gente me mueve, la compañía me llena, y hoy… hoy me sentí solo. Estoy acostumbrado a estarlo, siempre lo estoy en México, con o sin familia, mis amigos suelen estar lejos de mí, en otra ciudad o muy ocupados, siempre estoy solo y si puedo salgo con mi hermana, pero en Valencia esto no me había pasado, siempre estoy rodeado de gente y fue una retrospectiva interesante (y no por ello menos frustrante), extrañé México y luego odié mi situación ahí, pero no de la misma forma en que lo hago siempre, sino que pensé: “Oh México… allá tengo a la gente que me quiere…” después me dije “Si serás pendejo… ¿México?, sí, gente que me quiere pero es igual que hoy, como aquí, la gente no suele poder verme”. Me sentí solo como pocas veces.
Después recordé la serie “Angels in America” (esa serie de la HBO) y sentí un bonito escalofrío. La serie la vi cuando aún yo era muy cristiano y me pareció casi una blasfemia, muy poética, pero blasfemia al final. La tesis de la mini serie (o película larga para la tv, como gusten llamarle) es: Dios ha abandonado el cielo y la tierra, y ha dicho “arréglense como puedan”. ¡Dios nos ha abandonado! Es la premisa, como si la gente no lo pensara desde hace mucho tiempo atrás, pero la serie lo hace ver de una forma tan bella y dolorosa a la vez (y ciertamente tiene mucho que ver mi vena masoquista en ello). Recuerdo que vi “Angels in America” y sentí… esperanza. Sentí tranquilidad al darme cuenta que podemos ajustarnos a la existencia o no-existencia de un Dios, que todo depende del acomodo que le demos y la manera en que enfrentemos las cosas. Bueno, y si le agregan a que mi día de hoy lo pasé al lado de Hipatia (en la película “Ágora”) y la tesis de Amenábar de “Toda radicalidad en postura religiosa, política, social, etc. es mala”, así como el rechazo de casi todos mis conocidos aquí… bueno, ha sido un día para pensarle.
Me sentí como una película pausada de Rossellini, o peor aún (¿o mejor aún?), me sentí Juliette Binoche en “Copia certificada”, sentí que mi vida era una copia de una copia, una interpretación, una reinterpretación de todo lo que he visto y lo que me han (y he) medito en la cabeza, y dentro de esas cosas: El estar solo es algo malo.
Pero ahora me doy cuenta que estar solo no es malo. Lo malo es:
-Perder tantos amigos de un solo golpe.
-Tener novio y parece ser, a momentos, que no lo tengo.
-Rozar la infidelidad porque paso demasiado tiempo sin él.
-Que los hombres sólo me quieran para sexo, y si no es así, no les apetece ni un café.
-No encontrar paz en la literatura (como lo hacía antes).
-Que ver tanto cine se me haga deprimente (y no como antes, donde podía ser yo, sólo yo y ya)
He cambiado mucho en estos dos años, un cambio radical, soy otra persona muy distinta, lo veo en mis escritos, lo veo en mis gustos e impresiones. Mi cambio fue radical y por eso aún cargo con ciertos desfases de humor, como si una criatura hubiera crecido tan rápido y de manera tan prematura que quedaron grandes deficiencias en su cuerpo, disfuncionalidades.
Aún así, no entiendo, no lo entiendo ¡caray!, cómo estoy tan tranquilo e incluso feliz. Existe algo en mí, que si antes me hubiera pasado esto pensaría en la falta de un futuro. Pero hoy me digo que éste es el futuro que jamás pensé en vivir, jamás creí haber pasado todo esto cuando cumplí 19 años, y ahora, a los 22… bueno, espero tener un recuerdo por allá de los 30 y decir: Igual que antes, no pensé estar como ahora estoy… y es bueno, lo disfruto.
martes, 7 de junio de 2011
martes, 31 de mayo de 2011
Me dieron ganas
domingo, 29 de mayo de 2011
El hombre de Valencia...
A menos de dos meses de regresar a casa y en algunas ocasiones sólo pienso en lo mucho que lo voy a extrañar.
martes, 24 de mayo de 2011
Aquí... allá
lunes, 23 de mayo de 2011
Estaba triste...
jueves, 19 de mayo de 2011
No me canso
martes, 17 de mayo de 2011
Feliz cumpleaños a la campaña de cristal… feliz cumpleaños muy atrasadooo
Pues habría, debería, tendría… que estar escribiendo un par de ensayos para mi clase de escultura, sin embargo la tarea me parece absurda, voy en el cuarto tema de seis, y ni siquiera sé si voy bien… y en este momento no me importa JO!
Hace tiempo que fue el cumpleaños de mi blog “La campana de cristal”, no sé… ¿dos años y medio? Poco importa. Seré breve. Pobre blog de “Belle de Jour… Belle de Nuit”, nadie le cuenta los años, pero debería saber que éste blog perdurará, mientras el otro apenas le quedan unos meses de vida, seguro caducará. Me ha terminado por aburrir, ya no lo necesito más, aunque ahora escribo más en este porque tengo picos emocionales muy recurrentes, la verdad es que el último mes y medio he estado muy bien. ¿La razón? He viajado mucho, leído un poco, conocido gente espectacular, hermosos lugares, pasado momentos irrepetibles, tengo un novio que me quiere. Ahora me siento bien, un poco frustrado por la escuela, pero fuera de ello no tendría que quejarme. Pocas veces tengo una gran plenitud, y ahora la adquiero, deseo gozarme en ella. Es verdad, le debo mucho a mi novio, también a mi compañera y amiga de piso, le debo mucho a Europa por abrirme los ojos con sus virtudes y decadencias; tengo una visión distinta de este continente, una quizá de menor aprecio y por lo mismo amo a México aunque dicho afecto sea irracional.
“La campana de cristal” es un mundo dentro de este mundo alterno llamado ciberespacio. Lo necesitaba hace poco más de dos años, requería desfogarme, crear una fantasía, una crítica… necesitaba sencillamente escribir, pero ya no. Poco a poco se ha ido apagado y quizá llegue el momento en el que termine por abandonar a Leonard, mi protagonista de “La campana…”. Es un poco triste, quiero mucho a mi protagonista, sobre todo porque él se ha atrevido a cruzar barreras que yo apenas me permito imaginar. Él es, sin duda, más valiente que yo, pero también más infeliz. Ahora le he dejado disfrutar de las mismas mieles que yo, le he dado al fin un novio… y creo que eso nos bastará por el momento.
domingo, 15 de mayo de 2011
El domingo...
viernes, 13 de mayo de 2011
Cada escalón...
miércoles, 4 de mayo de 2011
Peligro de amores
sábado, 30 de abril de 2011
España
martes, 26 de abril de 2011
¿Mi peli favorita?
lunes, 25 de abril de 2011
Mi peor pesadilla
Después me vuelvo a formular la obligación de los feministas de nuestro siglo, el siglo XXI (y lo
crean o no corrí al google para decirme, ¿estamos en el XXI?, ¿qué siglo es este?, estoy más nervioso que nunca), me estoy replanteando y diciendo: ¿No acaso los feministas del siglo XXI deberíamos reprobar películas como “The women” aunque sean brillantes, de buen ritmo, con buenas actuaciones y graciosas?, ¿no acaso los feministas del siglo XXI deberíamos prescindir de las llamadas de nuestros amantes (masculinos)?, ¿Por qué le soy fiel a un hombre con quien no he concretado una relación seria (pero que ya dijimos que vamos a sernos fieles)? Que de fiel no tengo ni un pelo, ya se me ofrece un español para tener sexo y yo de: No… no… no… pero ¿a qué hora tienes libre?... y después me voy a una discoteca gay y ya beso en la mejilla a un italiano y un argentino me ofrece tener un trío, pero va que me resisto para no serle infiel al hombre con el que me veo muy ocasionalmente pero que sin embargo me llama a diario, y DIOS! Si no me llama hago un escándalo y le digo “Pensé que me habías olvidado EH!”
¿Les ha pasado?, ¿se han despertado una mañana y han descubierto que son su peor pesadilla?... Esta semana santa tuvo poco de santa, más alcohol en mi vida no había ingerido (y de comida ni se diga), pero más allá de eso, después de los tres días de fiesta y el cuarto de vómito, desperté al quinto día con una idea clara en mi cabeza “Soy un fraude, soy un fracaso”, quizá soy muy crítico conmigo mismo pero me he convertido en todo lo que siempre critico:
-Fiestero cuasi alcohólico que si no bebe no se la pasa muy bien, y si se le pasa la mano con la bebida pues vomito un poco de más… y si sale a relucir un drama yo lloro como magdalena (bueno, van dos veces que suelto el llanto, pero ha sido cada escenita)
-Esperando a que el hombre al que quiero me llame y después de una larga espera de casi 24 horas, él dice “Bueno mi amor, nos vemos…” y yo me derrito en un suspiro. En pocas palabras: parece que he perdido mi autonomía.
-Escribo dos cuartillas y me bloqueo… después reviso las dos mismas cuartillas del trabajo y digo “mierda”, y después vuelvo a releerla y me doy cuenta que sólo una cuartilla vale la pena y que eso no me ayuda demasiado… porque… WOW tengo como 9 ensayos y sólo he terminado uno… del cual no estoy tan orgulloso, y me pregunto ¿dónde he estado?, ah! Sí, en un bar, en un café, ebrio por ahí o en casas ajenas y teniendo sexo… bla, bla…
-Soy el cliché de la jotona, ya en serio, ahora sí soy un gay de lo más banal (SIII MÁSS DE LO NORMAL!). Me visto bonito para ir a una discoteca y medio me chuleen un par de tipos que ni al caso, que para variar son lo peorcito del lugar (y eso que tengo pareja “estable” con la que he establecido serle fiel, ¿se dan cuenta de la similitud de estable y establecido?... y que arriba dije que no sé si es algo serio pero acabo de poner “estable”). Me doy asco la verdad, balancearme por esos lugares algo ebrio y que el buen mozo de la entrada sea déspota y todavía me pregunto en mi cabeza: ¿Por éstos luchamos cada día?, ¿por estos tipos tan perfumaditos y bonitos?, los teóricos, artistas, literatos, gente apasionada con algún tipo de visibilidad gay, que se devana los sesos… ¿luchamos para que la gente bonita de los antros/discotecas gays nos traten mal sólo porque somos feos? Y ADEMÁS ¿ellos qué hacen? Ah sí, verse bien en el ropero general de la entrada y preguntarte “¿Nombre… estás en la lista?, no, no estás en la lista… ah sí… estás en la oootra lista” -IGUAL ENTRO GRATIS Y ESTOY EN LA LISTA, NOOO?? IDIOTA!!!- Da ganas de gritarles en la cara. La verdad, cuando Paco Vidarte escribió “No te metas en sistemas que no te aceptan” no sólo se refería a la psicología made in Freud, o la iglesia, o los doctores homófobos, NO!, se refería también a que ciertos gays como yo, así, no guapos, sin mucho dinero para comprar ropita linda, sin músculos, no europeos de peinados extravagantes y que somos latinos sin ese caché de ser latinos “ardientes”, aunque sí queridos, YO tengo bronceado natural (cosa que aquí los europeos pagan tanto para que les hagan bronceados color anaranjado, si serán brutos pues)bueno, va que a esta ¿minoría? No encajamos en esas discotecas, ¿a quién engaño?, no es mi mundo… en México voy porque puedo bailar y me gusta hacerlo, pero aquí en España ni bailan.
-Después me siento a ver la segunda película de “Sex and the city” por segunda vez… y analizo: ya qué idiotez, ¿eran igual de idiotas al inicio de la serie?, después recapacito y digo: no, no… después vuelvo a recapacitar y me repito: bueno, te engañas, te gusta esta serie pero la verdad es que pasó su tiempo, ya ni es inteligente y mucho menos contestataria…
-Y al final entro en shock porque me gusta “The women” de Cukor y me doy cuenta que se encuentra sustentada en varias bases misóginas… no lo entiendo, no me entiendo, no me quiero entender, entre más me entiendo me asusto, y entre más veo mis influencias me asusto más.
Soy mi peor pesadilla. Sin reparo… por hoy. Me ducharé e iré a dormir. Fin del día.